Guía para Adaptarse al Clima y la Cultura de Yucatán

En Mérida, los colores tierra, como el terracota, el beige y el ocre, se inspiran en la paleta de colores de la naturaleza circundante y ayudan a crear una sensación de calidez en los interiores. 

Los tonos vibrantes, como el verde esmeralda y el azul cobalto, se utilizan para acentuar y añadir un toque de frescura a los espacios. Las texturas naturales, como el mimbre, el ratán y la madera, se incorporan en muebles y accesorios para dar un aire orgánico y auténtico a la decoración.

Dado el clima cálido de Mérida, es importante maximizar el flujo de aire y la entrada de luz natural en los interiores. Las ventanas grandes, las puertas corredizas y los tragaluces son características comunes en el diseño de las casas y departamentos en la región.

 Se utilizan cortinas ligeras o persianas de bambú para controlar la cantidad de luz que entra, mientras que los ventiladores de techo y las unidades de aire acondicionado ayudan a mantener los espacios frescos durante los meses más calurosos. 

El mobiliario en Mérida tiende a ser funcional y cómodo, con líneas limpias y acabados naturales. Los muebles de madera maciza, como el cedro y el tzalam, son populares por su durabilidad y belleza.

 Los sofás y las sillas suelen estar tapizados en telas frescas y transpirables, como el lino y el algodón, en colores neutros que complementan la paleta de colores del entorno. Los accesorios decorativos, como almohadas tejidas a mano, hamacas tradicionales y cerámica artesanal, añaden un toque de autenticidad y color a los espacios.